No sé si han sido los mayas o si ha sido el 2013, pero lo cierto es que algo, «chámalle x», está pasando…
Estos días de descanso en casa han sido fantásticos y por cuestiones de difícil explicación porque todas ellas traen causa de emociones, sentimientos, pensamientos…
Si las analizo detenidamente, hay un sentimiento que, como si de un águila se tratase, lo observa todo desde las alturas: la serenidad. Y esa serenidad lleva una sonrisa gigante en su cara.
Han sido unos días distintos, empapados de recuerdos, de reencuentros (conmigo, contigo), de re-valoraciones de reflexiones, de revisitas y re-afirmaciones. Han sido días de certeza y de incredulidad.
Y si cierro los ojos y estoy contigo, veo lo que hemos construido en tantos años, y lo injusto del momento que atraviesas. Veo lo que no quiero ver, y me duele. Y entonces deseo lo que mereces, y es que esta racha acabe pronto y todo vuelva a tu normalidad. También veo tu esencia, que durante todos estos años se ha mezclado con la mía, y que ahí sigue, viva como el primer día. Veo que a pesar de todo, a pesar del tiempo y la distancia, aquí seguimos, estando y siendo.
Y si cierro los ojos y estoy contigo, veo lo que hemos construido en tantos años, y lo bien que estás, y lo tú que eres. Veo lo que quiero ver… Te veo a ti!!! Y a pesar de todo aquí seguimos. Tú con tus olas, yo con mi todo. Y veo que te siento, que te pienso. Veo esos ojos, sinceros y puros, que sonríen afirmando que algo ha cambiado, que cuando vas y vienes, ves que sois (somos) muchos, pero que no hacéis (hacemos) ruido porque para eso ya están (estamos) otros. Veo el azul y el verde. Veo la diversión, la seguridad, la tranquilidad, el disfrute de vivir. Y me contagias, me contagias con tu magia.
Y si cierro los ojos y estoy contigo, veo lo que construimos, de-construimos, y hace un año volvimos a mirar y a decidir abrazar. Y entonces me haces recordar. Y me alegra saber que vuelves a formar parte de algo.
Y si cierro los ojos y estoy contigo, veo lo que construimos en taaaantos taaaantos años y a lo que hemos llegado. Y veo lo que fuimos y lo que somos. Veo que vas cambiando, poquito a poco, y pensando y reflexionando. Veo que te cuestionas, que te preocupas, que te permites, que te castigas, que te perdonas. Veo que creces. Veo que cada vez eres más tú y que no importa el tiempo que pase. Veo que cada vez te quieres más y entonces yo también te quiero más.
Y si cierro los ojos y estoy contigo, veo lo que construimos en unas horas. Veo los nervios, la ilusión, las ganas. Me veo y te veo, aunque no vea nada. Y me pregunto aunque no me contesto. Y recuerdo los dibujos animados, la magia, las canciones, lo olores. Y sonrío. Y me siento a esperar, disfrutando la espera porque… Estamos vivos!!!!